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16 de marzo de 2012

Julia Navarro vs Matilde Asensi




Después de leer La hermandad de la Sábana Sánta de Julia Navarro, pude disfrutar de mi  primera charla sobre libros. Resultó muy gratificante descubrir un nuevo tema de conversación que me hacia crecer y conocer diferentes opiniones. Mi querida Inma Vidal, conocedora de mi fascinación por el género de misterio e investigación,  me recomendó leer cualquier libro de Matilde Asensi. Aseguró que sus tramas me atraparían y acertó.

La primera que cayó en mis manos por casualidad fue El Salón del Ámbar. Más tarde descubrí que tanto para Julia Navarro, como para Matilde Asensi fueron sus respectivas “opera prima”.
Tienen muchas cosas en común. Para empezar, el argumento esta centrado en el mundo del arte. La búsqueda del desaparecido Salón del Ámbar y la investigación de un incendio en la catedral de Turín donde se custodia la Sábana Santa. En las dos novelas un grupo de amigos de diferentes nacionalidades, acompañan a una protagonista femenina solitaria y muy profesional. Cómo no, las dos autoras añaden una historia de amor que resulta  muy forzada, casi por obligación.

Un aspecto en el que se distancian Julia Navarro y Matilde Asensi es el ritmo. En La Hermandad.... , la narración alterna capítulos de la investigación actual con otros donde explica la historia de la Sábana Santa. Resultan extramadamente aburrido, se puede leer perfectamente saltando dichos episodios históricos y la novela ni pierde ni gana.

Matilde Asensi abusa de referentes muy conocidos, (no se si con esto pretende la complicidad del  lector), incluso menciona marcas concretas.  
 “En los años sesenta y setenta, España estaba mucho más preocupada por la llegada de turistas a las playas de Benidorm y Marbella […]”
 “Mientras con una mano pulsaba el mando a distancia del equipo de música y ponía el marcha el CD de Jarabe de Palo, […]”
 “[…] yo luchaba desesperadamente por sacar del garaje mi flamante BMW 525 tds, color granate metalizado […]”
Pretende ser original utilizando recursos  poco habituales como las notas a pie de página, un tanto absurdas e innecesarias ya que en ocasiones son meras traducciones del alemán.
Otro de estos recursos es la escritura en MAYÚSCULAS cada vez que “habla” un personaje concreto.



 
En definitiva,  las dos novelas cumplen su función, donde el lector es en un mero espectador de los acontecimientos. Me gusta el planteamiento inicial de Matilde Asensi, parece que vaya a ser una trama muy interesante, pero que nunca llega a desarrollar. Julia Navarro es mucho más correcta, pero le falta chispa, espontaneidad y elementos de sorpresa. 

Evidentemente, tengo que seguir buscando otras novelas del mismo género. ¿Alguna sugerencia?